sábado, 3 de octubre de 2020

Sopa de ajo leonesa

Ajo, aceite, tomate, pimentón y pan del día anterior (mejor hogaza). Se corta el pan en trozos, preferiblemente pequeños. En un recipiente se pone agua a hervir añadiendo sal, aceite y el tomate entero y pelado. Aparte, en una sartén, se rehoga el ajo cortado en láminas, cuando el ajo está tostado se añade pimentón y se remueve bien evitando que se queme. Cuando el tomate está hervido se machaca en un mortero y se vuelve a añadir al agua donde se ha hervido, incorporando al tiempo el pan y el refrito. Se deja hacer hasta que alcance el espesor deseado.

Opciones: Si se desea que las sopas sean más espesas, se añaden el tomate y el pan al refrito, y se va añadiendo el agua de la cocción según el gusto. Se puede añadir un huevo crudo por comensal en el mismo momento que el resto de los ingredientes y dejar que se haga con la sopa.

2 comentarios:

  1. La sopa de ajo no lleva tomate.
    En mi casa se hacían a partir del sofrito de ajo y cebolla, al que al final se le agregaba el pimentón para que no se quemará y el agua.
    Cuando daba el primer hervor se le agregaba el pan cortado en rebanadas y se esperaba que fuera un segundo hervor durante unos cinco o diez minutos, troceando entonces el pan con la cuchara de hierro.
    Opcionalmente se le puede agregar jamón o mejor pancarta en tacos al sofrito inicial y un huevo por comensal al final de la cocción, para que se haga con el calor residual.
    Mejor si se hace en cazuela de barro.

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  2. Existen, parece mentira con los pocos elementos que intervienen, infinidad de versiones, casi todas parecidas a la que tú me dices. Si recogí esta específica, es porque es diferente.

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